La iniciativa Caja de la Esperanza celebró su 10.º aniversario el 20 de febrero de 2024 bendiciendo a niños de diversas zonas de Mindanao, Filipinas. La celebración tuvo lugar en Libandayan, un barangay (barrio) del interior, en el corazón de la ciudad de Iligan. La Fundación para el Desarrollo Infantil Nazarios (NCDF por su sigla en inglés) y la Iglesia del Nazareno de Iligan organizaron el acto de entrega de regalos.

En 2014, Leody Echavez III (ahora, coordinador regional de Ministerios Nazarenos de Compasión) comenzó su viaje como voluntario del área en la ciudad de Zamboanga. Durante este tiempo, fue testigo del profundo impacto de la guerra en los niños desplazados internamente. Junto con su equipo local, impulsado por el deseo de llevar felicidad y alegría a estas jóvenes almas, Echavez puso en marcha el proyecto Caja de la Esperanza. En los últimos diez años, esta iniciativa se ha convertido en un faro de luz para innumerables niños de Mindanao.

La esencia de la iniciativa Caja de la Esperanza reside en las cajas cuidadosamente embaladas y llenas de juguetes nuevos, ropa, artículos escolares, kits de higiene y otros artículos de primera necesidad. Donantes y padrinos adoptan con entusiasmo a uno o más niños, comprometiéndose a alegrarles la vida con regalos llenos de significado. Esta iniciativa anual ya ha tenido un impacto significativo, distribuyendo casi 2,000 cajas en diversas zonas de Mindanao.

Los beneficiados de la Caja de la Esperanza de este año fueron principalmente niños de las tribus que estudian en la escuela primaria de Libandayan. A pesar de la falta de instalaciones, los profesores de la escuela han mantenido su pasión por ofrecer una educación de calidad a sus alumnos. La entrega de regalos fue un espectáculo conmovedor, en el que algunos alumnos de la NCDF y sus padres, miembros de la Iglesia del Nazareno, y el superintendente del Distrito Mindanao West, Dan Balayo, que también es coordinador de Desarrollo Integral de la Niñez para la Región Asia-Pacífico, se unieron para repartir amor y alegría.

La selección de Libandayan como comunidad beneficiaria surgió del trabajo comunitario de la iglesia de Iligan en asociación con la Cooperativa Agrícola de Sikyop y la Granja de Libandayan para la promoción y el cultivo del café.

La comunidad expresó su profunda gratitud por la iniciativa de la Caja de la Esperanza, reconociendo las bendiciones que aportó a sus hijos. Los miembros de la comunidad se mostraron entusiasmados al enterarse de la conversación en curso entre la iglesia local y sus socios para el seguimiento del desarrollo infantil, la educación, la protección y la participación de la comunidad.

Cuando la iniciativa de la Caja de la Esperanza cumple una década repartiendo alegría, su repercusión va mucho más allá del contenido de las cajas de regalo. Simboliza una comunidad que se une para levantar el ánimo de sus miembros más vulnerables, fomentando un sentimiento de esperanza, solidaridad, sostenibilidad y optimismo de cara al futuro.

Una pequeña visión iniciada en medio de un conflicto se ha convertido en un testimonio del poder de compasión y acción colectiva de la iglesia local.

--Iglesia del Nazareno Asia-Pacífico.