Líderes de jóvenes en PNG construyen puentes y rompen barreras
Líderes de jóvenes actuales y emergentes se reunieron en el Distrito Bromley de Papúa Nueva Guinea del 14-18 de diciembre de 2016 para la tercera Conferencia Nacional de Líderes de Jóvenes llevada a cabo en dicho país.
Más de mil personas asistieron a este evento, incluyendo delegados de Misiones Nazarenas Internacionales y el Coordinador Regional de la Juventud Nazarena Internacional de Asia-Pacífico Janary Suyat De Godoy, la Coordinadora Regional de MNI Connie Aebischer, el Coordinador de la JNI del Área Australia Nueva Zelanda Cameron Batkin y el Coordinador de la JNI del Área Melanesia Sur Pacífico Daniel Latu.
“La conferencia fue sin duda un tiempo de compañerismo orquestado por Dios,” dijo Latu. “No fue realizado en los centros de las ciudades modernas de Port Moresby o Lae, si no en el hermoso y escabroso terreno montañoso del Valle Jimi. Nuestros visitantes estarían de acuerdo en afirmar que no pudo haberse realizado en un mejor lugar”
El evento fue importante no solo para el ministerio de jóvenes en Papúa Nueva Guinea, pero también para el Área Melanesia Sur Pacífico.
“La mera presencia de los líderes regionales y de área, acampando y compartiendo con los participantes por cinco días, rompió barreras y construyo puentes,” dijo Latu. “Interacciones como esta fomentan la unidad – algo que los jóvenes en los distritos restantes de Melanesia Sur Pacífico desean.”
Las metas de la conferencia incluyeron:
- Reconocer la labor que Dios ya está haciendo en PNG y comprometerse con encontrar formas de colaborar y proveer recursos para otros en su servicio para el Reino por medio de la JNI y la MNI.
- Identificar, capacitar, equipar y lanzar líderes de jóvenes actuales y emergentes al ministerio, incluyendo ministerios de compasión, evangelismo, servicio comunitario, discipulado, adoración, medios de comunicación, etc.
- Continuar siendo intencionales en desarrollar colaboraciones entre la JNI y la MNI del Área Melanesia Sur Pacífico, buscando formas más consistentes, creativas y prácticas de trabajar juntos en misiones y ministerio.
- Entender el valor de la juventud de la iglesia local en la estructura de la JNI y en la familia global de la Iglesia del Nazareno.
Latu está seguro de que dado todo lo que aprendieron durante la conferencia, los participantes descubrirán más a medida que continúan su caminar con Dios. Poco después de la conferencia, un participante compartió su historia con Latu:
Un joven que asistió a la conferencia sentía la carga de parte del Señor por los jóvenes heridos y mal aconsejados en su comunidad; compañeros que – de vez en cuando – se burlaban de él y lo ridiculizaban por ser cristiano. Él los vio como sus amigos y vino buscando formas para ayudarlos a conocer al Señor que él ha llegado a amar y servir. Dios estuvo ministrando a su vida durante nuestro tiempo juntos. Él simplemente fue animado a confiar en el Señor, a amar a aquellos que Dios lo ha llamado a servir y no rendirse con ellos. Al fin y al cabo, como fue el Señor el que puso está carga en su corazón, es el Señor quién le mostrará las estrategias y metodologías necesarias.
El día de Navidad, él estaba regresando de un servicio en la tarde cuando se encontró con varios de sus amigos, todos en desorden, bajo la influencia del alcohol y fuera de sus cabales. Al pensar en los eventos, ellos hicieron algo que él jamás hubiese anticipado. Uno de los peores corrió hacia él y en vez de ridiculizarlo e insultarlo, él lo abrazó y comenzó a derramarse delante de él, diciéndole que quería dejar los hábitos y el estilo de vida que no le estaba ayudando, arrepentirse y vivir la nueva vida con Jesús. Otros dos jóvenes se unieron, cada uno deseando lo mismo: un nuevo comienzo con Jesús. Ellos le pidieron perdón al joven por todas las veces que lo habían ridiculizado. El joven quedó sin palabras. Él fue a Jimi buscando y encontró a un Dios que ya estaba trabajando. Una cosa es clara: Él sabe donde comenzar y es continuando el ministerio a ellos. Él está agradecido a Dios por la oportunidad y enamorado de este descubrimiento.
El envió un resumen de los eventos y escribió la siguiente reacción:
“… hermano, no les dije nada; ni tan siquiera les predique a ellos, pero estoy asombrado de ver que Dios está haciendo cosas grandes. Mi corazón está lleno de gozo. A Dios sea la gloria. Ahora se que es el amor de Dios … así que no me rendiré.”
A medida que seguimos hacia delante, podemos estar todos de acuerdo en que este es el reino de Dios y Él lo construirá como a Él le plazca.
En humildad, amor y sabiduría, trabajando en unidad, sirvamos a otros a medida que obedientemente le seguimos y permitamos que Dios sea Dios.