El siguiente es un testimonio de un hombre llamado Ahmed de Sierra Leona. Él comparte cómo llegó a conocer a Jesucristo como su Señor y Salvador en una reciente proyección de la Película JESÚS.

Mi nombre es Ahmed Tejan y tengo 63 años. Estoy divorciado, pero tengo cuatro hijos. Soy un exsoldado y luché en la guerra civil rebelde de Sierra Leona que duró once años. A lo largo de esos años de guerra sangrienta, usé [con vehemencia] amuletos y talismanes, que creía que servían como medio de protección contra las balas y cualquier otro ataque de los enemigos. 

Creía mucho en esos amuletos; y eran muy fáciles de usar, porque mi fe anterior permitía su uso. Así que, los he usado desde que era joven. Creía firmemente que [esos objetos] me habían estado protegiendo del daño y el peligro del enemigo, hasta que vi a regañadientes la Película JESÚS.

Uno de los pastores me invitó a una proyección de la Película JESÚS. No quería asistir; y les dije que ver la película no me convertiría en cristiano, y que era leal a mi religión. En la función, me sorprendió cómo Jesucristo realizó milagros extraordinarios que nunca había visto. Eso encendió mi espíritu, y me di cuenta de que Dios es mi único protector. 

Me conmovió mucho la ocasión en que Dios salvó a los discípulos en esa terrible tormenta. Me di cuenta de que los amuletos que había estado usando no eran exactamente lo que me protegía; sino el amor que Dios tenía por mí. Entonces, cuando el pastor hizo un llamado al altar, salí y le entregué mi vida a Jesucristo, quien es el protector de mi vida. Desde ese momento, he estado viviendo en paz y con la confianza de que tengo un Dios que puede cuidarme sin frotarme ni colgarme amuletos alrededor de la cintura para protegerme.

Por favor, oren para que Dios me dé la fuerza para reconciliarme con mi familia; y para que sea un testimonio de que Dios no sólo salva, sino que también protege.

--Iglesia del Nazareno Región África.