
Celebrando la vida y el legado de Alberto Ainscough

Con gratitud por su legado de fe y servicio, la Iglesia del Nazareno en Argentina despidió a Alberto Eduardo Ainscough el 9 de julio de 2025.
Fue pastor, misionero y médico; un fiel siervo de Dios que dedicó toda su vida a proclamar el evangelio, brindar sanidad física y espiritual, y formar líderes para el Reino.
Nacido el 21 de junio de 1935 en Rosario, provincia de Santa Fe, completó su educación primaria y secundaria en diversos colegios de Buenos Aires y también en Inglaterra. Sirvió a su país como policía durante su servicio militar; y también fue presidente de distrito de la Juventud Nazarena Internacional (JNI) en Argentina y Uruguay.
En su juventud, conoció a la adolescente Rosita Russo, a quien evangelizó y con quien compartió la escuela dominical en la Iglesia del Nazareno de Bering. Más tarde, Rosita se convertiría en su esposa y compañera de ministerio.
Alberto se graduó de cardiología en la Universidad de Buenos Aires. Comenzó su ministerio pastoral en la Iglesia del Nazareno Conde; y, posteriormente, fue transferido a la iglesia Villa Ballester. Desde allí, él y Rosita fueron enviados como los primeros misioneros internacionales no estadounidenses de Misión Mundial de la Iglesia del Nazareno, sirviendo como médicos y pastores en la ciudad de Whasin, en la República de la India. Allí, acompañados de sus hijos, Elizabeth y Alberto Jr., durante cuatro años evangelizaron y fundaron iglesias.
Después, regresaron a Argentina, donde nació su tercera hija, Noemí. Continuaron su ministerio pastoral en la Iglesia del Nazareno Terrero; y, posteriormente, regresaron a la iglesia Villa Ballester, donde construyeron una nueva iglesia en la Avenida 9 de Julio. También fundaron una iglesia en Villa Elisa; y establecieron un grupo de oración en Pilar, donde actualmente se encuentra la iglesia más grande del Distrito Central de Argentina.
Más tarde, en su hogar, fundaron la Misión de Villa Luro, donde finalmente se construyó el templo que albergó su despedida y donde sirvió como pastor emérito hasta sus últimos días.
Durante décadas, Ainscough viajó como médico y misionero, tanto a nivel nacional como internacional. Con el apoyo de Rosita y Noemí, completó su maestría en Teología con honores. En 2012, fue el primer estudiante en presentar su tesis por Zoom. También fue profesor en el Seminario Teológico Nazareno, mentor de muchos pastores y misioneros actuales; y hasta hace poco, organizaba reuniones de oración en su casa.
Alberto y Rosita formaron juntos una hermosa familia con tres hijos y siete nietos: Melisa, Lucas, Tomás, Timy, Brenda, Juan Manuel y Ezequiel.
Escribió a mano cientos de recetas médicas a petición de las congregaciones; y ministró sanidad, consuelo y amor, dejando un profundo impacto en Argentina y más allá.
--Iglesia del Nazareno Región América del Sur.